El helado que no se derrite… porque acá nada juega a lo normal.
Lo congelamos hasta que cruje, le sacamos toda el agua con vacío extremo y lo dejamos inflado, ligero y listo para explotar sabor desde la primera mordida.
Es helado, sí pero en modo salvaje.
Crujiente, portátil y perfecto para llevarlo donde el helado normal se rinde.
Esto no es un postre. Es un upgrade. Es Snash.
El helado que no se derrite… porque acá nada juega a lo normal.
Lo congelamos hasta que cruje, le sacamos toda el agua con vacío extremo y lo dejamos inflado, ligero y listo para explotar sabor desde la primera mordida.
Es helado, sí pero en modo salvaje.
Crujiente, portátil y perfecto para llevarlo donde el helado normal se rinde.
Esto no es un postre. Es un upgrade. Es Snash.